Hombre mirándose la cara en un espejo

En Santiago 1:23-24

23 Porque si alguno es oidor de la palabra y no hacedor, es semejante a un hombre que mira su rostro natural en un espejo; 24 porque una vez que se ha mirado a sí mismo y se ha ido, inmediatamente ha olvidado qué clase de persona era.

¿La palabra "hombre" aquí significa "masculino"? Sería curioso en vista de que mirarse al espejo y olvidarse de lo que estaba mal no es algo que veo que les suceda tan a menudo a las mujeres como a los hombres...

recuerda hacer que el título sea específico y claro; agregue la cita de la frase con el verso ref.
@ Michael16 ¿no es esa una preferencia personal?
Tal vez, pero de todos modos debe tratar de ser claro y específico en el título, solo ayudará a atraer a los espectadores, de lo contrario, es vago, clickbait, poco interesante. No sé acerca de las reglas, pero debería haber reglas sobre esto.
@ Michael16 Comparto una opinión diferente allí y lo haría por fe. Entonces, a menos que haya una regla estricta que lo imponga, no veo realmente el punto... Intente preguntar aquí en Meta primero

Respuestas (1)

Santiago 1:23 Versión estándar en inglés

Porque si alguno es oidor de la palabra y no hacedor, es semejante a un hombre [G435] que mira atentamente su rostro natural en un espejo.

Léxico griego de Thayer
FUERTES NT 435: ἀνήρ

  1. con una referencia al sexo, y así distinguir a un hombre de una mujer; ...
  2. con referencia a la edad, y para distinguir a un hombre adulto de un niño:

La misma palabra griega se usa en Mateo 14:21

Y los que comieron fueron unos cinco mil hombres [G435], además de las mujeres y los niños.

¿La palabra "hombre" aquí significa "masculino"?

Sí, literalmente lo es. Sin embargo, la lección se aplica tanto a hombres como a mujeres.

25 Pero el que mira fijamente en la ley perfecta que da libertad, y persevera en ella, sin olvidar lo que ha oído, sino poniéndolo en práctica, será bienaventurado en lo que haga.

El punto es que quienquiera que seas, mires más profundo. Cambia tu manera de comportarte para ser consistente con la ley perfecta de Cristo.