¿Qué fue el debate Nove / Millar, qué importancia tiene para la historiografía de la Unión Soviética?

El debate Nove / Millar fue un debate entre historiadores económicos en la década de 1970, donde se revisó seriamente la comprensión occidental del desarrollo económico soviético en las décadas de 1920 y 1930. En particular, el debate abordó la relación entre los sectores agrícola e industrial de la economía, y las posibles formas en que el partido podría haber estructurado estas relaciones para lograr la industrialización. Con mayor detalle:

  • ¿Cuáles fueron los puntos de conflicto en el debate?
  • ¿Qué dijeron las diferentes perspectivas en el debate?
  • ¿Cuáles fueron las implicaciones de estas perspectivas para el potencial de industrialización soviética bajo el control del partido?
  • ¿Cuál fue el efecto del debate sobre la historiografía de la Unión Soviética?
Si conoce la respuesta, podría responder a su propia pregunta; estilo clásico de preguntas y respuestas. Incluso se anima. De lo contrario, considerando el (aunque interesante) comentario de Novar/Millar sobre otra pregunta, este es un intercambio socrático indirecto.

Respuestas (1)

El debate de Nove-Millar fue uno entre dos economistas estadounidenses sobre si la "colectivización" del campesinado de 1932 era necesaria o no para llevar a cabo el programa de industrialización "de choque" de la Unión Soviética. Este debate surgió porque el 80% de la riqueza de la Unión Soviética en ese momento todavía se encontraba en la agricultura.

Para 1928, un grupo de campesinos ricos, los llamados kulaks, había surgido de la reforma/redistribución agraria que había tenido lugar después de la Revolución. Como resultado, poseían los excedentes económicos necesarios para impulsar el proceso de industrialización.

La solución de Stalin fue simplemente expropiar (ya menudo matar) a los kulaks para movilizar estos excedentes económicos. Esto se logró colocando la mayor parte de la tierra agrícola (excepto pequeñas parcelas privadas) en granjas "colectivas". Estas políticas inicialmente atrajeron al ala "izquierda" del Partido Comunista, hasta que se hizo evidente que Stalin nunca tuvo la intención de hacer nada para mejorar la suerte de los campesinos más pobres. En cambio, estos excedentes fueron suficientes para hacer el trabajo de industrialización, a costa de un gran descontento social.

El contraargumento fue que la Nueva Política Económica de Lenin fue suficiente para crear una clase empresarial urbana. Así, una política agrícola similar dirigida a los kulaks podría ser suficiente para inducirlos a reinvertir sus excedentes en un programa de industrialización sin recurrir a la expropiación forzosa y la violencia que la acompaña. Por ejemplo, en Japón, después de la Restauración Meiji de 1868, a los grandes terratenientes que fueron expropiados se les dio aproximadamente el valor de la tierra expropiada en bonos a 30 años, lo que les permitió continuar con sus vidas e incluso reinvertir en la sociedad industrial moderna.

La importancia para la historiografía fue que este debate se originó en los Estados Unidos, no en la Unión Soviética, y por lo tanto representó un replanteamiento de la política industrial soviética por parte de "forasteros". Por lo tanto, no forma parte del pensamiento "principal" sobre este tema.