¿Qué precipitó la restauración Meiji?

¿Qué otros factores, además de la llegada del Comandante Perry a Edo, precipitaron la restauración Meiji?

Respuestas (1)

El comodoro Matthew C. Perry llegó a la bahía de Edo el 8 de julio de 1853 con una carta del presidente estadounidense Millard Fillmore. La carta de Fillmore expresó los objetivos de su país en términos modestos; su esperanza general era simple que:

los Estados Unidos y Japón deben vivir en amistad y tener relaciones comerciales entre sí

y que sería beneficioso para ambas naciones si Japón:

cambiar las leyes antiguas para permitir un libre comercio entre los dos países

Perry entregó las cartas de Fillmore y algunas de las suyas en medio de mucha pompa y ceremonia, asegurando a los funcionarios del shogunato que regresaría la próxima primavera con una fuerza mucho mayor si fuera necesario para conocer la respuesta del shogun a las solicitudes del presidente Fillmore.

Las demandas de Perry dejaron al Shogunato con un dilema insoluble. Militarmente, Japón fue lamentablemente inadecuado para lidiar con el conflicto con los Estados Unidos, pero abandonar la política de reclusión daría lugar a críticas generalizadas de las clases dominantes dentro de Japón.

Perry regresó a la bahía de Edo el 14 de febrero del año siguiente y los funcionarios del shogunato, que carecían de un mandato de Daimyo para la guerra o la paz, iniciaron negociaciones con los estadounidenses. El 31 de marzo, las dos naciones firmaron un tratado que permitía a los barcos estadounidenses hacer escala en Shimoda y Hakodate y que un cónsul estadounidense se instalaría en Shimoda.

La crítica generalizada esperada de la capitulación del aislamiento japonés estaba próxima y se sumó a una insatisfacción más general con el shogunato Tokugawa.

Desde principios del siglo XIX, Japón había sufrido un declive en la base social y económica que sustentaba el régimen Tokugawa. La clase Samurai y sus maestros Daimyo se empobrecieron cada vez más mientras la clase comerciante comenzó a vivir:

más allá de su estatus y medios económicos

Naiyu Gaikan - "Problemas internos y externos"

La combinación del fracaso del shogunato para lidiar con el cambiante panorama interno y esta nueva capitulación ante la creciente amenaza extranjera, condujo a la creación de una oleada de jóvenes samuráis que promulgaban violencia contra los despreciados extranjeros y los funcionarios del shogun que toleraban la presencia del bárbaro.

Fueron necesarios otros catorce años de discordia interna para que esta oleada se convirtiera en un levantamiento nacional, encabezado por un nuevo emperador y su ejército moderno, capaz de derrocar al régimen que había gobernado Japón durante casi dos siglos y medio.

Irónicamente, la facción imperial victoriosa abandonó su objetivo inicial de expulsar a los extranjeros y adoptó una política agresiva de modernización con el motivo tantas veces declarado de convertirse en un país grande y respetado, a la altura de las naciones más avanzadas del mundo.

Citas y referencias de:

James L. McClain. Japón, una historia moderna WW Norton & Co, 2002