¿Hay alguna buena evidencia de que la tristeza cause dolor en el pecho ("dolor de corazón")?

Se cree comúnmente que la tristeza del rechazo romántico causa dolor en el pecho ("dolor de corazón"). Esta no es una hipótesis tan descabellada, dado que el afecto es solo la representación mental de la entrada sensorial (por ejemplo, dolor en el pecho) de nuestro cuerpo a nuestro cerebro.

Pero, ¿hay alguna buena evidencia de este vínculo? Es una creencia generalizada que nunca he visto corroborada sistemáticamente, por lo que sería genial ver un estudio al respecto.

Esta pregunta es un duplicado de otra pregunta bastante reciente pero, francamente, está mejor redactada. ¿No podrías haber ayudado al otro OP y sugerir una edición?
@RobinKramer Bueno, esa pregunta era por qué , y tengo más curiosidad por el si . Por lo general, no es una buena idea postular un mecanismo para un fenómeno que en realidad puede no existir, por lo que estoy tratando de ver si existe antes de responder por qué existe. ;) Aunque estoy de acuerdo, están muy relacionados.
Creo que te refieres a cogsci.stackexchange.com/questions/15697/… , pero también está cogsci.stackexchange.com/questions/5518/… , y en particular cogsci.stackexchange.com/questions/4265/… . Pero como esta pregunta es más específica, seguí adelante y la respondí de todos modos.

Respuestas (1)

Existe una afección médica recientemente reconocida llamada miocardiopatía inducida por estrés , asociada con dolor en el pecho y daño físico en el ventrículo izquierdo:

Debido a que este debilitamiento puede desencadenarse por estrés emocional, como la muerte de un ser querido, una ruptura o ansiedad constante, también se conoce como síndrome del corazón roto.

Aunque la mayoría de los pacientes se recuperan en unas pocas semanas, en algunos casos extremos, se sabe que esta condición es fatal. Como este diagnóstico aún es bastante nuevo, la prevalencia no se conoce con precisión, pero podría ser bastante común en las rupturas; consulte Koulouris et al (2010) para obtener una revisión.

La angustia psicológica también puede ser un factor causal en otras afecciones cardíacas (p. ej., Carey et al 2014 ; Graff et al, 2016 ; Buckley et al, 2012 ) que pueden estar asociadas con el dolor torácico. Sin embargo, además de estos efectos indirectos, los sujetos de prueba generalmente pueden distinguir el dolor psicológico del dolor físico, por lo que aunque las personas pueden informar síntomas psicosomáticos como dolor en el pecho asociado con el rechazo romántico, no se espera que sea un indicador.

No obstante, en todas las culturas y en muchos idiomas diferentes, se usa la misma terminología para describir el dolor físico y psicológico, lo que sugiere una similitud en la experiencia.

El "dolor social" es el estrés mental resultante del rechazo , el duelo, la angustia , la exclusión, etc. Hay bastantes estudios que respaldan un vínculo entre el dolor social y el dolor físico; consulte Eisenberger (2012) para una revisión bastante reciente. En el paradigma experimental típico, a los sujetos que recientemente han experimentado dolor social se les recuerda su experiencia, provocando la respuesta de dolor social, mientras se les monitorea usando herramientas de medición fisiológica y/o neurológica como fMRI.

Dichos estudios han demostrado que la experiencia del dolor social utiliza muchos de los mismos mecanismos neurológicos que el dolor físico. Por ejemplo, de Kross et al (2011) :

Aquí demostramos que cuando el rechazo se provoca poderosamente, al hacer que personas que recientemente experimentaron una ruptura no deseada vean una fotografía de su expareja mientras piensan en ser rechazados, las áreas que apoyan los componentes sensoriales del dolor físico (corteza somatosensorial secundaria; ínsula posterior dorsal) se activan.

Combinado con resultados similares de estudios de lesiones, sensibilidad al dolor y cambios en la dopamina y el cortisol, esto ha llevado a la hipótesis de que los humanos desarrollaron un mecanismo para el dolor social que recicla el sistema de dolor físico ( Macdonald & Leary, 2005 ; Eisenberger & Lieberman, 2004). ), p.ej:

Se ha sugerido que, en las especies de mamíferos, el sistema de apego social tomó prestados los cálculos del sistema del dolor para prevenir las consecuencias potencialmente dañinas de la separación social.

Sin embargo, la superposición entre los mecanismos neuronales para el dolor físico y no físico no es completa, lo que presumiblemente explica las diferencias en la experiencia informada.

Hay casos en los registros de defunción donde las personas fallecieron poco tiempo después de la muerte de su cónyuge. Este hallazgo relativamente nuevo podría explicarlo. Gran hallazgo.